De pronto Joan Ignasi Pla convoca una cena en Terra Mítica y creo que ha sido ahí en donde ha anunciado la presentación de una moción de censura, aunque antes se había filtrado la noticia. Ambas cosas resultan sorprendentes -que organice la cena en TM y que presente la moción- y plantean una nueva pregunta. ¿Qué pretende el líder de los socialistas valencianos? Hacerse notar, sin duda. Cambiar el signo de las encuestas y levantar la moral de los suyos. Llevan algún tiempo sus huestes hablando de la corrupción del partido en el gobierno a voz en grito, sin que nadie les haga caso. Tal es su atonía que el presidente de la Generalidad puede permitirse el lujo de decir memeces como esta: "estamos en nuestro mejor momento, tengo el mejor equipo, los mejores cargos públicos y a los mejores militantes". No sé quién le habrá hecho creer que los demás somos tontos.
Tengo el convencimiento de que el si el PP ha ganado tres elecciones seguidas en la Comunidad Valenciana es más por demérito de los socialistas que por méritos suyos y con esta afirmación no pretendo negarle aciertos. Ya he dicho más de una vez que el hecho de ganar o perder unas elecciones no significa que el programa o los candidatos sean mejores o peores. Yo creo que el PSOE tiene más simpatías que el PP en la Comunidad Valenciana, pero perdió el favor popular por algunas tomas de postura del partido, que no tienen nada que ver con la cuestión ideológica y que molestaron a buena parte de sus propios votantes, aparte de los demás. Rectificar llevaría a los socialistas a convertirse en favoritos en todas las consultas electorales, pero no se le aprecia ninguna capacidad en este sentido.
Hay un alcalde popular que vive en un grandioso chalet, que dice que le alquila un promotor, que construye mucho en su término, mediante contrato verbal y que este mismo promotor le presta un coche de lujo. Quizá este alcalde sea honrado o, por lo menos, el juez no pueda probarle ninguna irregularidad. En ese caso, habría que ponerle orejas de burro y mandarlo a un lugar más adecuado para él, lejos de la alcaldía. Pero no parece que Camps lo vaya a hacer porque ni él ni Pla respetan a los ciudadanos. ¿Será que éso no es necesario para gobernar?
El asilo de Benissa
Teatro Romano de Sagunto
La lección imprescindible. Lo que padres e hijos deben saber para andar por la vida
También en Periodista Digital
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