miércoles, julio 12, 2006

Javier Marías y las fallas

No creo en absoluto que Javier Marías sea tonto. Tampoco se me ocurre pensar ni por asomo que sea uno de esos zascandiles sin rigor que repiten lo primero que oyen, sin pararse a hacer averiguaciones sobre el asunto si lo que han oído les gusta. Tiene que haberle engañado alguien, convenciéndole de cosas que no son ciertas y tiene que haberlo hecho a conciencia, procurándole certezas, pero que sin duda están fundamentadas en bases falsas. Porque los falleros no se disfrazan, se visten; y lo hacen en las fechas señaladas y para los actos que tienen previstos. Tampoco me parece a mí que Marías pueda ver falleros a menudo por Madrid, sino que quien sea le habrá convencido de que algún tipo de disfraz es propio de la gente fallera. Esta afirmación presupone que el ilustre autor no ha venido jamás a Valencia por Fallas ni tampoco las ha visto por televisión, cosas ambas que caben dentro de lo posible. Lo que antecede viene a cuento por el texto que sigue


. Pero cuando veo a esas masas en plan festivalero, con silbatos y tambores y bandurrias y bongos, con su vocerío de cancioncillas y pareados “divertidos”, a menudo disfrazadas de falleros o de chirigoteros, me cuesta tomármelas en serio y se me aparecen como un síntoma más de la enfermedad de andar en grupo, de juntarse en mogollón


que es parte del articulo que con el título Español cabal o rufián, publicó en el País Semanal el pasado día nueve. Yo no necesito ser fallero, que no lo soy, para darme cuenta de que lo que ha hecho Javier Marías es ofender a los falleros en particular y a los valencianos en general y aunque, como he dicho, supongo que ha actuado engañado y no de mala fe. Pero por supuesto que no voy a pedirle que rectifique. Él sabrá que es lo que debe hacer.

Bésame mucho

Miquel Navarro

Calle de las Víctimas del Terrorismo

También en
Periodista Digital

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Pues yo no me siento en absoluto ofendida. A mi siempre me ha parecido que los falleros se refugian en la masa y que solos no serían nada. Y que si la policía no les dejase hacer lo que les da la gana, todos los valencianos, en particular y en general, nos sentiríamos mucho más felices.

Hala, lo que no sé es si los falleros se sentirían ofendidos si el gobierno de la Comunitat en general y el de l'Ajuntament en particular, dejasen de darles un trato de favor respecto a los demás valencianos y valencianas... en general, en particular, ¡qué más da!

una valenciana ofendidísima

Vicente Torres dijo...

Hola, valenciana:
Supongo que entre los falleros, como en todas partes, hay personas de todas clases.
Con respecto a lo que le molesta, me permito preguntarle si lo que desea usted es que las fallas estén mejor reguladas o si, por el contrario, preferiría que desaparecieran.
Saludos