Hoy, bajo negros auspicios, que ojalá no se confirmen, se celebra el referéndum sobre la Constitución Europea, en Francia. Las negociaciones para llegar a un acuerdo entre todos los paises fueron arduas y trabajadas. Necesitaron de muchos especialistas en muchas materias. Evidentemente, el texto es perfeccionable, pero es probable que ni siquiera la mayoría de los participantes en las negociaciones pueda tener una opinión bien fundamentada sobre la totalidad del texto consensuado.
En este sentido no se entiende que los gobiernos decidan trasladar a la ciudadanía la responsabilidad de la aceptación del texto. Dada la complejidad de las negociaciones, por el número de paises participantes, cada uno con su propia historia y costumbres, lo correcto hubiera sido que se hubieran encargado de aprobarlo o rechazarlo los parlamentos de cada país, a los que se paga precisamente para que tomen esas decisiones que precisan de especialistas. Ocurre que los políticos gustan de manipular a sus respectivas opiniones públicas y de utilizarlas para su propio provecho. En el caso español, Zapatero en ese momento, y quizá en éste también, tenía mayoría, pero la gente entendió que la pregunta no era Europa sí, Europa no, sino Zapatero sí, Zapatero no, y mayoritariamente se quedó en casa. Si hoy triunfa el no en Francia habrá sido para castigar al gobierno francés, lo cual sería un castigo a la irresponsabilidad.
Vivimos, lo vemos a diario, en una sociedad bastante irresponsable. A los expertos les costó mucho llegar a un texto consensuado, y eso que Europa es una necesidad. Con mayor grado de responsabilidad entre todos, se hubiera logrado una Constitución mucho mejor. Pues ese texto que costó tanto de lograr, luego se lo juegan los políticos a cara o cruz, buscando el beneficio de sus partidos y de ellos.
En este sentido no se entiende que los gobiernos decidan trasladar a la ciudadanía la responsabilidad de la aceptación del texto. Dada la complejidad de las negociaciones, por el número de paises participantes, cada uno con su propia historia y costumbres, lo correcto hubiera sido que se hubieran encargado de aprobarlo o rechazarlo los parlamentos de cada país, a los que se paga precisamente para que tomen esas decisiones que precisan de especialistas. Ocurre que los políticos gustan de manipular a sus respectivas opiniones públicas y de utilizarlas para su propio provecho. En el caso español, Zapatero en ese momento, y quizá en éste también, tenía mayoría, pero la gente entendió que la pregunta no era Europa sí, Europa no, sino Zapatero sí, Zapatero no, y mayoritariamente se quedó en casa. Si hoy triunfa el no en Francia habrá sido para castigar al gobierno francés, lo cual sería un castigo a la irresponsabilidad.
Vivimos, lo vemos a diario, en una sociedad bastante irresponsable. A los expertos les costó mucho llegar a un texto consensuado, y eso que Europa es una necesidad. Con mayor grado de responsabilidad entre todos, se hubiera logrado una Constitución mucho mejor. Pues ese texto que costó tanto de lograr, luego se lo juegan los políticos a cara o cruz, buscando el beneficio de sus partidos y de ellos.
9 comentarios:
Lo peor son las conscuencias a largo plazo de ese punto de irresponsabilidad de la ciudadanía.
Esperemos que este referendum no se convierta en un plebiscito sobre el gobierno de Chirac como ocurrió en España; y viendo el altísimo grado de participación creo que no será así, creo que el hecho de que el gobierno dejara en manos de los ciudadanos la decisión, diciendo Chirac el jueves que eran los franceses quienes serían responsables del resultado, y no su gobierno, ha conseguido motivar a los ciudadanos a participar y ser responsables con Europa. Esperemos que digan oui.
Un saludo! :)
Ya sufrimos las irresponsabilidades a largo plazo de años anteriores...
Me gustaría que pudierais leer el post que he dedicado a este asunto. Teneis otros (www.escolar.net).
Gracias
Por cierto, de blog en blog empecé en la revista QUÉ! y he acabado aquí. :)
Hoy, sin que sirva de precedente, le voy a dar la razón. Dudo mucho que los votantes del Estado español se hubieran leido el texto y, en caso que sí lo hubieran hecho, tuvieran conocimientos suficientes como para saberla interpretar. Reconozco que no la he leido, ni pienso hacerlo (lo mismo que me pasa con el Ulises de Joyce, es pesadísimo :) ). Es cierto que los políticos se han lavado las manos y han trasladado a la ciudadania la responsabilidad de decidir. También es denunciable el uso partidista de este tipo de consultas, cada partido intenta arrimar el ascua a su sardina y reinterpretar los resultados en beneficio propio.
Mi razonamiento fué el siguiente:
Si Fraga,Bono,Rosa Díaz,Aznar,Alfonso Guerra, Zaplana y los implicados del Gal votan "sí", y Omnium Cultural, ERC, Oleguer Presas, Joel Joan, Lluís Llach...votan "no", yo voto "no".
Las cosas van como van :)
No es irresponsable, cuando claramente un documento tan absurdamente complicado va a afectar a tantos millones de personas.
Sabes que esn eso discrepo contigo (en el tema Europa en general) pues si bien Europa es necesaria ( que nadie duda de que lo es... también es necesario que en ella se vean reflejadas todas las naciones ( pues Europa no deja de ser un gra conjunto de naciones y nacionalismos, mal les pese a muchos) y en esta constitucion muchos no nos veiamos reflejados ( si bien es cierto que la leí, tambien es cierto que no tengo la formación necesaria para entenderla de cabo a rabo, pero si a grandes rasgos)y es por ello que abogamos por el NO. Y no creo que sea ningua catastofre que salga el NO a la Carta magna y tenga que reescribirse, al contrario...
Un beso enorme
Núria
Núria, sabes perfectamente que no me molesta la discrepancia, sino que la saludo y sobre todo si sirve para que aparezcas por aquí.
Besos,
Precisamente porque lo se, porque no es la primera vez que no estamos de acuerdo en algo y siempre ha sido un placer "discuitirlo" contigo es por lo que te hago el comentario anterior. Besazo
Núria
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