Kirchner y el fútbol

Kirchner, que comenzó modificando la agenda que tenía marcada, obligando con ello a cambiar la del Rey, para ver un partido de fútbol, terminó regalando una camiseta de la selección argentina a Zapatero. El fútbol, lo primero.
Para describir la situación de su país usó los términos infierno y purgatorio, demostrando con ello pocos miramientos con los interlocutores, escasa capacidad descriptiva, meras ganas de embaucar.
Considera absurdo hablar de gobiernos populistas y dice que hay que referirse a gobiernos progresistas, con lo que vuelve a demostrar su intención de embaucar. ¿Qué tipo de progreso es el que pretende Evo Morales? ¿O Hugo Chávez? Cuando se habla de progreso, hay que explicar a qué progreso se refiere, de lo contrario el asunto no pasa de ser una apropiación indebida de un término que por sí mismo no indica nada.
Kirchner ha estado en España y de su visita cabe deducir que antes de cerrar tratos con él conviene asegurarse de que además de su palabra hay otras bases firmes en las que confiar.

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