sábado, febrero 11, 2006

El fin de ETA

Yo no sé si Rajoy tiene el cerebro en los pies y es por ello por lo que lo utiliza para dar patadas.
Creo que se equivoca el PP con su estrategia antiterrorista. No se debe intentar sacar rédito electoral a la lucha contra ETA. La función del partido de la oposición debe de ser la de colaborar con el gobierno en este campo, dejando claro cuales son sus criterios. En mi opinión, negociar con ETA es darle la victoria, o parte de ella. El partido que esté en la oposición debe dejar claro, públicamente, que no está dispuesto a transigir en este sentido. Lo que no debe hacer jamás es suponer, aunque se diera el caso de que tuviera muchas evidencias. Las decisiones o las declaraciones, por lo menos en lo que a estos asuntos se refiere, hay que tomarlas o hacerlas sobre hechos concretos. En privado puede decirle al gobierno que no piensa colaborar si se da algún supuesto sobre el que no se esté de acuerdo. Pero en público hay que dar la sensación de unidad. Discutir en público es hacer el juego a los terroristas. Los políticos españoles han hecho muchas tonterías que han beneficiado a ETA. No solo los del PNV.
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1 comentario:

MEZQUETILLASVK dijo...

El fin de la violencia debe ser el objetivo.

Batasuna o la fuerza política que surja después del fin de las armas que tod@s deseamos, van seguir existiendo y es más saran claves en cualquier gobierno nos guste o no.

El PP miente con el GAL, como eres una persona inteligente sabes perfectamente que no fue una política de Gobierno sino de Estado y ello explica a que niveles llegó el PP para obtener el poder, un delito de Alta Traición.

Hay que ser generosos como se fue generoso con los Fascistas criminales de nuestro Pais, nunca se han pedido cuentas ni se han analizado los Emporesarios que se enriquecieron con la sangre de miles de Españoles.

Repito hay que ser generosos e intentar pasar página por el bien de tod@s.

Estoy a favor por la negociación con ETA y tranquilo que los acuerdos serán diferidos en el tiempo.

Un fuerte abrazo de una Catalan a un Valenciano, ambos Españoles.