Todo el mundo admira la nobleza de los toros. Son bastantes menos los que tratan de incorporarla a su ser, acaso porque desestiman la utilidad de dicha cualidad.
Cuando hablamos de una persona noble todo el mundo entiende que se trata de alguien que siempre intenta actuar rectamente, con sentido de la justicia, que no tiene intenciones ocultas y que procura no dañar a nadie. En caso de legítima defensa, procuraría hacer el menor daño posible.
Una de las características de las personas nobles es que pueden reconocer los méritos ajenos. Esto es más importante de lo que a primera vista pueda parecer, puesto que si toda la humanidad hubiera actuado así, es fácil comprender que las mujeres no hubieran soportado tanta injusticia, que al final pagamos todos, ni tampoco los homosexuales ni los minusválidos. Etc.
Por contra, la persona mezquina sólo actúa en función de sus propios intereses. Cualquier reconocimiento al prójimo se basa en este mismo detalle. Las personas mezquinas son castradoras, ya que coartan la creatividad.
Una de las características de las personas nobles es que pueden reconocer los méritos ajenos. Esto es más importante de lo que a primera vista pueda parecer, puesto que si toda la humanidad hubiera actuado así, es fácil comprender que las mujeres no hubieran soportado tanta injusticia, que al final pagamos todos, ni tampoco los homosexuales ni los minusválidos. Etc.
Por contra, la persona mezquina sólo actúa en función de sus propios intereses. Cualquier reconocimiento al prójimo se basa en este mismo detalle. Las personas mezquinas son castradoras, ya que coartan la creatividad.
Se da el caso de que siempre son estas personas mezquinas las que siempre explican que ellas sabrían como arreglar el mundo. La gente noble sabe que bastaría con que se extendiera la nobleza.
6 comentarios:
Un texto bello has escrito hoy, Vicente. Terso y sencillo pero muy profundo. Con él nos ayudas a conocer mejor la naturalez humnana.
La nobleza de los toros me temo que la valoras respecto a un comportamiento en una plaza de toros. En tales situaciones extremas, no aflora la nobleza sino la desesperación del animal ante la inminente muerte.
Y el mundo, con un poco de bondad que pusiéramos cada uno estaría arreglado.
Saludos
¿La nobleza de los toros? Bueno, en este rincón del mundo no estamos demasiado vinculados a esa cultura. Aquí tenemos por animales totémicos al jabalí, el oso o el lobo. Y la nobleza reside en aquellos que son capaces de vivir de acuerdo con unos valores y principios que respeten al prójimo; y sin traicionarse jamás.
Supongo que la nobleza viene a partir de relativizar las cosas y de no creer en verdades absolutas. En cuanto a la nobleza de los toros será la misma que la de las gallinas, no?. La nobleza está en el punto medio entre el egoismo y el proismo, es un ejercicio de inteligencia y de racionalidad es por eso que los fanáticos nunca serán justos ni nobles.
Tristany, para ser noble es necesario ser valiente y las gallinas son sinónimo de lo contrario.
Los fanáticos son débiles, por tanto, tampoco son capaces de albergar la nobleza.
Muy Socrático tu razonamiento, Vicente.
Yo también pienso que no saber bien la definición de noble, puede convertirlo en sumiso
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