Los españoles hemos sido convocados por nuestro gobierno, el próximo 20 de febrero, a dar nuestra aprobación o nuestro rechazo a la Constitución Europea. A mi parecer, creo que hubiera sido mejor que el texto se debatiera en el Congreso de los Diputados, en donde están las personas con capacidad para entender estos asuntos. Pero todo parece indicar que lo que el gobierno pretende es que los españoles nos impliquemos en la idea europea. Pero creo que esto es como llover sobre mojado. Los españoles ansiamos tanto ser europeos (aquello de que África empieza en los Pirineos nos caló hondo, entre otras cosas porque integrados en en Europa, no estábamos), que estamos total y absolutamente dispuestos a luchar por esa idea.
Otra cosa es el texto de la Constitución, manifiestamente mejorable. Pero es la Constitución que se ha pactado entre todos los gobiernos, incluido el español.
Yo pienso votar que sí, puesto que el gobierno de España, sea del partido que sea, la ha aceptado.
Con mi voto doy mi respaldo a una idea solidaria. Porque todo lo que sea unirse con otros es compartir. Compartir nuestro futuro con el de los ciudadanos de otros países. Ser más fuertes, para poder ayudar a otras naciones más pobres e invitar a otros a unirse también.
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